¿Recuerdas todas esas veces que tu madre
nos dijo que si nos bañábamos mientras caía una tormenta, nos iba a caer un
rayo? ¿Recuerdas cuantas veces nos dijo que ya quería nietos? ¿Recuerdas cuanto
tu padre nos preguntaba que cuando nos casaríamos? ¿Lo recuerdas? Porque yo sí.
Sé que terminamos mal, y en verdad deberías de saber cuánto lo lamento, yo no quería
que termináramos así. Fuiste y eres una persona muy especial en mi vida pues
terminamos compartiendo muchas cosas lindas al igual que momentos únicos y
fuertes. No te culpo por todo lo que hiciste, y no hay justificación por todo
lo que nos llegamos a hacer/decir. En verdad te diría que me disculparas, pero
no tiene caso pues no es una disculpa sincera. Lamentablemente, me cuesta decirlo pero es la
verdad, desde que saliste de mi vida todo se ha mejorado conmigo. Me estoy
superando, cumpliré varios sueños, te diría que me siento completa, pero eso
aun no pasa. Sé que el destino nos tiene preparado algo, bueno o malo, pero es
lo que nos merecemos. No te deseo mal,
simplemente deseo que te des cuenta de lo cruel que fuiste conmigo. En esta
vida todo se paga, desgraciadamente. Se feliz que yo sonreiré al pensar que
estas contento. El día menos esperado, yo sé, que esta historia quedara atrás y
simplemente serán hermosos recuerdos de momentos increíbles y lecciones que la
vida me dio. Te quiero, y te querré siempre. Recuerda que yo te prometí estar aquí
siempre, y yo si lo cumpliré.
Se separaron y tomaron caminos opuestos, y
se olvidaron de que el mundo era redondo.