Nunca imagine que iba a perderte. Quisiera
poder regresar el tiempo para poder hacer tantas cosas pendientes pero ya no
hay remedio. Platicar contigo alegra mi vida como no tienes idea. Te quiero de
nuevo en mi vida. Me duele pensar que ya no estamos juntos, que por el momento
tu vida y mi vida no combinan. Quisiera poder comprender como es que no estás
feliz y aun no quieres terminar eso que tienes. ¿Te digo algo? Llevo meses rogándole
a Dios, al Cosmos, a lo que tú quieras que si realmente eres para mí que te
quedes en mi vida, y si no que te vayas.
Desgraciadamente parece que de alguna u otra manera tienes que seguir en mi
vida. ¿Por qué? No lo sé. No sé qué
parte de TE EXTRAÑO no me entiendes. Prefieres conformarte con algo que no eres
feliz. ¿Por qué no entiendes lo que está pasando? ¿Por qué no abres los ojos?
Solamente hazlo una vez más, ábrelos… y date cuenta de las cosas. Estas tan
aferrado a una idea y al miedo de que no te das cuenta de que sigo aquí,
dispuesta a todo por ser feliz.
Solamente te estoy pidiendo que pienses las cosas, estoy cansada de esperar y de suplicarte que
reacciones. No pensé que me iba a convertir
en tu pasado. Aunque si así será prefiero salir y desaparecer de tu vida en
este instante. Será lo mejor para los dos. Sera lo mejor para mí porque aun
duele y mucho. Solamente no olvides que
te quiero, y te querré siempre. Pensé que iba a tener la oportunidad de algún día
decirle a mis hijos “Me case con el amor de mi vida.” Pero veo que no. Jamás lo
olvides, te querré siempre y tú sabes que es más que eso.
viernes, octubre 25, 2013
martes, octubre 22, 2013
Reflexionando.
¿Nunca te
ha pasado que tienes una relación que no quieres terminar? ¿Juraste nunca separarte
de esa persona tan especial? ¿Pensaste que jamás te ibas a despedir de esa
persona?
Pues, a mí sí me ha pasado. Cuando pase por esa situación nunca imagine que podría llegar a pasarme con él, me costó mucho trabajo poder despedirme. Es terrible pensar que tendrás que recorrer la vida sin la persona que era tu “todo” y duele más cuando te das cuenta que el futuro de esa persona no combina con el tuyo. Es difícil poder aceptar que todo ese hermoso y magnifico sueño ha terminado. Creí que el mundo se acabaría, que me a morir sin él… ¡Oh, realidad! El mundo sigue dando vueltas, la vida sigue avanzando y yo sigo aquí. Continúo tratando de aceptar la realidad. Tal vez en ese entonces no vi todo lo que hacía mal, pero al igual que yo cometí errores, él también los cometió. El orgullo pudo más en ese momento y nos hizo pensar que lo de nosotros ya no tenía remedio, desgraciadamente, el orgullo pudo más con él. Actualmente, él tiene una relación con la que trata de “ser feliz” ¿Duele? Sí, demasiado. Por más que quiera regresar el tiempo, no hay la manera de hacerlo. ¿Actualmente platicamos? Sí. ¿Lo extraño? Sí. ¿Trato de tener una amista con él? Sí. Al final hay una pregunta que no he podido responder a nadie, ni a mí misma. ¿Por qué? No lo sé. Inconscientemente, pienso de que en algún futuro le caiga un pedazo de meteorito en la cabeza y le acomode las ideas para que se dé cuenta de que realmente me extraña. ¿Pasara? No lo sé. Hay tantas preguntas sin respuesta pero ya me he atormentado suficiente para romperme la cabeza buscándoles respuesta. En algún futuro, la realidad llegara a darme una cachetada y me dirá que lo que realmente tengo que hacer es dejarlo ir. Tarde o temprano tengo que aceptarlo, tarde o temprano tiene que dejarme ir, tarde o temprano pueden pasar muchas cosas. Esa situación está llena de tal vez, a lo mejor, posiblemente, no lo sé, espero que, etc. Me pongo a pensar que es realmente lo que yo quiero… Se va al leer estúpido después de todo lo que paso con él aunque yo sigo dispuesta a todo con él. Sigo dispuesta a que si la vida o el destino o el cosmos o lo que sea me vuelve a dar una oportunidad con él, la tomare, sin importarme lo que me digan todos los demás. ¿Por qué? Porque simplemente quiero ser feliz. ¿Eso es lo que todos queremos, no? Al final, si me equivoco será mi culpa, me volveré a caer, volveré a llorar, pero será otra lección a la cuenta.
Pues, a mí sí me ha pasado. Cuando pase por esa situación nunca imagine que podría llegar a pasarme con él, me costó mucho trabajo poder despedirme. Es terrible pensar que tendrás que recorrer la vida sin la persona que era tu “todo” y duele más cuando te das cuenta que el futuro de esa persona no combina con el tuyo. Es difícil poder aceptar que todo ese hermoso y magnifico sueño ha terminado. Creí que el mundo se acabaría, que me a morir sin él… ¡Oh, realidad! El mundo sigue dando vueltas, la vida sigue avanzando y yo sigo aquí. Continúo tratando de aceptar la realidad. Tal vez en ese entonces no vi todo lo que hacía mal, pero al igual que yo cometí errores, él también los cometió. El orgullo pudo más en ese momento y nos hizo pensar que lo de nosotros ya no tenía remedio, desgraciadamente, el orgullo pudo más con él. Actualmente, él tiene una relación con la que trata de “ser feliz” ¿Duele? Sí, demasiado. Por más que quiera regresar el tiempo, no hay la manera de hacerlo. ¿Actualmente platicamos? Sí. ¿Lo extraño? Sí. ¿Trato de tener una amista con él? Sí. Al final hay una pregunta que no he podido responder a nadie, ni a mí misma. ¿Por qué? No lo sé. Inconscientemente, pienso de que en algún futuro le caiga un pedazo de meteorito en la cabeza y le acomode las ideas para que se dé cuenta de que realmente me extraña. ¿Pasara? No lo sé. Hay tantas preguntas sin respuesta pero ya me he atormentado suficiente para romperme la cabeza buscándoles respuesta. En algún futuro, la realidad llegara a darme una cachetada y me dirá que lo que realmente tengo que hacer es dejarlo ir. Tarde o temprano tengo que aceptarlo, tarde o temprano tiene que dejarme ir, tarde o temprano pueden pasar muchas cosas. Esa situación está llena de tal vez, a lo mejor, posiblemente, no lo sé, espero que, etc. Me pongo a pensar que es realmente lo que yo quiero… Se va al leer estúpido después de todo lo que paso con él aunque yo sigo dispuesta a todo con él. Sigo dispuesta a que si la vida o el destino o el cosmos o lo que sea me vuelve a dar una oportunidad con él, la tomare, sin importarme lo que me digan todos los demás. ¿Por qué? Porque simplemente quiero ser feliz. ¿Eso es lo que todos queremos, no? Al final, si me equivoco será mi culpa, me volveré a caer, volveré a llorar, pero será otra lección a la cuenta.